Entre los días 22 y 24 de agosto se celebró en la ciudad de Johannesburgo el XV encuentro de los países BRICS. Las resoluciones tomadas en el mismo generaron un movimiento en las placas tectónicas del poder mundial, de trascendencia histórica. Se avanzó en el intercambio comercial en monedas nacionales, por fuera de la tutela del dólar, se comenzó a debatir sobre la creación de una moneda común en base a una canasta de divisas nacionales y se incorporó a seis nuevos miembros (Arabia Saudita, Etiopía, Irán, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Argentina) al grupo fundador. En la decisión se tuvo en cuenta la necesidad de poner en sintonía la organización con los tiempos que corren hacia un nuevo orden mundial basado en la cooperación, la paz y el desarrollo, el equilibrio planetario y las sugerencias de cada miembro fundador. Rusia sostuvo el ingreso de Egipto. EAU, AS e Irán contaron con el apoyo de China. El ingreso de Etiopía fue argumentado por la República Sudafricana y Argentina por el tesón, la perseverancia y el nivel de estadista de Lula, y la capacidad diplomática y la audacia del presidente Xi Jinping y el peso de China en las relaciones internacionales. No esta demás recordar las gestiones de China en diciembre de 2022 para acercar posiciones entre AS e Irán lo que culminó 6 meses después en la reapertura de las respectivas sedes diplomáticas y en el ingreso de ambos en los BRICS. Llegar al documento final no fue sencillo. Había entre los cinco miembros fundadores algunas diferencias en cuanto a la oportunidad de incorporar nuevos socios. Para destrabar la situación el presidente Xi viajó 24 horas antes a Johannesburgo y se reunió en privado con el presidente Cyril Ramaphosa y otros altos funcionarios del gobierno sudafricano. El respeto y el agradecimiento a China y su presidente por la ayuda brindada por esa nación en la lucha contra el Apartheid, la creciente presencia de China en toda África y la colaboración para enfrentar los efectos de la Covid 19, ayudaron a destrabar una situación difícil, ya que el país anfitrión era remiso a incluir en la agenda nuevas incorporaciones, fundamentalmente por presiones del bloque anglosajón y la influencia de estas potencias desde su pasado colonial. De esta manera se fue allanando el camino de forma tal que el miércoles 23 por la noche se anunció la incorporación de los 6 nuevos miembros BRICS. Con el agradecimiento a los que creyeron en Argentina, debemos celebrar esta GRAN NOTICIA. Sin embargo, los que seguimos el proceso de los BRICS desde su gestación a partir de la década del 90 del siglo pasado y su puesta en valor en 2009, somos conscientes que para el común de las personas es un tema bastante ajeno. Por lo tanto, surgen algunas preguntas: ¿Por qué debería interesarle al ciudadan@ de a pie el ingreso a los BRICS? ¿En qué modificaría su cotidianeidad? ¿Cómo traducir, lo que consideramos uno de los mayores logros de la política exterior de Argentina de los últimos años, a l@s jóvenes, a la mujer, al hombre, a los que todos los días madrugan para ganarse la vida y a los millones de jubilad@s que diariamente cuenta los pesos para poder alimentarse y acceder a sus medicinas? Los sectores populares están reclamando al gobierno nacional, y con razón, acciones concretas para modificar el rumbo que permita enfrentar con éxito las elecciones de octubre y eventualmente de noviembre. Es necesario avanzar en cambios estructurales que modifiquen la matriz distributiva y que el ajuste lo paguen los que siempre se beneficiaron. Por lo tanto, consideramos que explicar las posibilidades que nos abre el ingreso a los BRICS debe pasar a formar parte de la campaña electoral. Es verdad que el actual gobierno fue mezquino al momento de jugarse por el ingreso a la organización, pero como sea es una oportunidad invalorable que se le abre al país para comenzar a solucionar algunos problemas básicos. Volviendo a los interrogantes, brindamos una opinión sobre algunos beneficios directos de pasar a ser parte del BRICS PLUS o BRICS 11 a partir del 1 de enero de 2024: 1) El FMI perderá la categoría de ser el único financista de última instancia. Si en un futuro cercano podemos ingresar al Nuevo Banco de Desarrollo BRICS podremos acceder a créditos blandos sin imposiciones de política económica lo cual permitirá evitar o morigerar ajustes en tarifas, servicios, salarios, jubilaciones y recortes de obras públicas. 2) Argentina y otros países podrán avanzar en superar la eterna falta de dólares (restricción externa) al comerciar con monedas nacionales, como ya se comenzó a realizar, lo cual redundará en un fortalecimiento de las reservas, enfrentar las maniobras monetarias especulativas, reducir la inflación y nos brindará capacidad para impulsar nuestra industria nacional y crear empresas estatales que compitan en el mercado con las privadas. En este sentido se podrá estar en condiciones de generar una empresa estatal de alimentos para salir al cruce de las empresas formadoras de precios que hoy nos someten a la angustia diaria con sus remarcaciones provocadoras, desestabilizadoras y golpistas. 3) Cambiará la relación de fuerzas dentro del FMI. Hasta el 1 de enero de 2024 el único país con poder de veto en esa organización es EE.UU. con 16,5% de los votos. A partir de esa fecha los votos sumados de los 11 países BRICS superarán el 17 %, por lo cual la imposición de los planes de ajustes, no será tan sencillo imponerlos. 4) Nos permitirá integrar nuevas cadenas de valor en la fabricación de manufacturas, bienes durables, emprendimientos científicos y de investigación con otros países aumentando la productividad, generando puestos de trabajo y mejorando los ingresos. 5) El ingreso a los BRICS es un espaldarazo en la integración regional, en mejorar la fluidez comercial con Brasil y lograr emprendimientos de conectividad que tanta falta le hacen a nuestra región, como por ejemplo la conexión bioceánica Santos en Brasil, al Puerto de Ilo en Perú. 6) Nuestro ingreso a la organización y el robustecimiento global de la misma nos pone en mejores condiciones para enfrentar a los enemigos del pueblo, debilitándolos, tanto a los de adentro como los de afuera. Por algo será que los principales medios concentrados de comunicación no quieren ni hablar del tema. Finalmente, y destacando la “buena nueva” es necesario decir que los BRICS nos dan una oportunidad, que si bien la culminación de la gestión no es nueva ya que el camino se inició en 2014 en la VI cumbre en Fortaleza, Brasil, en el gobierno de Cristina Fernández, hay que dejar claro que ahora mucho depende de nosotros, de la deriva que tome la política nacional. Ya hemos visto en los días pasados la brutalidad, ceguera, fidelidad de clase, e ignorancia con la que se manifestaron los líderes de la oposición respecto de este logro argentino y del Sur Global. Su cipayismo, expresado en el Hotel Alvear de Buenos Aires en el Council of the Américas ante sus amos pudo más, por ahora, que los propios intereses económicos y financieros de este sector. Curiosamente es la misma oposición que durante el ultimo gobierno de CFK le reclamaba al oficialismo estar dejándonos fuera del mundo la que hoy se opone al ingreso a los BRICS, cuando esta organización dentro de 4 meses pasará a representar el 35% de la economía global, casi el 50 % de la tierra cultivable y el 75% de la producción de la energía mundial. Tal vez para ellos el mundo solo sea el Occidente colonizador. Como dirían muchos amantes del juego, ahora la pelota está en nuestro campo, veremos si logramos jugarla acertadamente para beneficio del pueblo. IADEG-CEFMA-IDEAL